Nos equivocamos queriendo cambiar las leyes, que será necesario seguramente en la mayoría de los casos, pero lo que ahora se discute, al menos yo, es la idoneidad de algunos jueces en el ejercicio de sus "funciones".
El discrepante juez Ricardo González está en su derecho en "discrepar" e incluso considerar inocentes a los miembros de la manada. Será su apreciación implícita en su modo de vida creo yo.
Pero lo que no tienen razón sus entusiastas partidarios hoy, que no mañana, ya se sabe como anda este asunto, es que el sexo sea "realizado en un entorno de jolgorio y diversión". ¿Considera acaso "su señoría" que este sexo denunciado por la muchacha era diversión y jolgorio? Dejémonos de machadas y cambios en la legislación, lo que hay que haces es elegir a los jueces más capaces, hay que someternos a análisis, sin cachondeo, mentales. No es posible que el "razonamiento" de la postura del juez hilarante, por decir algo, se base en el jolgorio y diversión. ¿Cómo defender esto amigo Herrera?
Ahora hay que cambiar las leyes, hay que cambiar la tropa y dejar los mandos. No mi general, hay que cambiar todo este asunto. No es posible que las únicas garantías las tenga el mangante malhechor y sinvergüenza. ¿Presunción de inocencia?¿Acaso no la tiene la violada? Es aterrador.
NO hay un solo día que la radio me anime a levantarme. Veo con estupor que la banda catalana, hasta las narices de vulnerar la ley, anda suelta por ahí, incluso tienen a un presidente del su parlamento que un día si y otro también la vulnera y ¿qué me dicen de la TV3? Encima eso lo pagamos todos los insultados diariamente.
¡Qué bien! cómo para levantarse. Dar la vuelta e intentar que pase el tiempo y esperar lo que le ocurra a los vascos, por ejemplo, para ir tirando. Detrás vienen unos tipos, dicen que "ciudadanos" cuya aspiración es mandar, lo que sea por mandar y cómo conozco a unos cuantos, cerrar los ojos y esperar que pase el tiempo.
LO dicho...¿cambiar las leyes? Para qué si no se cambia la mentalidad ruin de muchos que tienen que aplicarlas.
Les dejo algo entretenido. ¡Échense a temblar!
Me dicen mis amigos que viven en Cataluña que la atmosfera de trabajo es insoportable. Es lo que se llama democracia.